Voy a seguir creyendo, aún cuando la gente pierda la esperanza...
Voy a seguir dando amor, aunque otros siembren odio...
Voy a seguir construyendo, aún cuando otros destruyan...
Voy a seguir hablando de Paz, aún en medio de una guerra...
Voy a seguir iluminando, aún en medio de la oscuridad...
Y seguiré sembrando, aunque otros pisen la cosecha...
Y seguiré gritando, aún cuando otros callen...
Y dibujaré sonrisas en rostros con lágrimas...
Y transmitiré alivio cuando vea dolor...
Y regalaré motivos de alegría donde sólo haya tristezas...
Invitaré a caminar al que decidió quedarse...
Y levantaré los brazos a los que se han rendido...
Porque en medio de la desolación, siempre habrá un niño que nos mirará, esperanzado, esperando algo de nosotros, y aún en medio de una tormenta, por algún lado saldrá el sol, y en medio del desierto crecerá una planta.
Siempre habrá un pájaro que nos cante, un niño que nos sonría y una mariposa que nos brinde su belleza.
Pero... si algún día ves que ya no sigo, no sonrío o callo, sólo acércate y dame un beso, un abrazo, o regálame una sonrisa, con eso será suficiente. Seguramente me habrá pasado que la vida me abofeteó y me sorprendió por un segundo.
Sólo un gesto tuyo hará que vuelva a mi camino. Nunca lo olvides...
Voy a seguir dando amor, aunque otros siembren odio...
Voy a seguir construyendo, aún cuando otros destruyan...
Voy a seguir hablando de Paz, aún en medio de una guerra...
Voy a seguir iluminando, aún en medio de la oscuridad...
Y seguiré sembrando, aunque otros pisen la cosecha...
Y seguiré gritando, aún cuando otros callen...
Y dibujaré sonrisas en rostros con lágrimas...
Y transmitiré alivio cuando vea dolor...
Y regalaré motivos de alegría donde sólo haya tristezas...
Invitaré a caminar al que decidió quedarse...
Y levantaré los brazos a los que se han rendido...
Porque en medio de la desolación, siempre habrá un niño que nos mirará, esperanzado, esperando algo de nosotros, y aún en medio de una tormenta, por algún lado saldrá el sol, y en medio del desierto crecerá una planta.
Siempre habrá un pájaro que nos cante, un niño que nos sonría y una mariposa que nos brinde su belleza.
Pero... si algún día ves que ya no sigo, no sonrío o callo, sólo acércate y dame un beso, un abrazo, o regálame una sonrisa, con eso será suficiente. Seguramente me habrá pasado que la vida me abofeteó y me sorprendió por un segundo.
Sólo un gesto tuyo hará que vuelva a mi camino. Nunca lo olvides...
No hay comentarios:
Publicar un comentario