Gracias por la compañía

Conozco a una persona que tiene verdadero éxito en la vida, que puede sentirse orgulloso de cómo es y de lo que hace. Él dice que es raro, pudiera ser que la palabra correcta fuera “único”, y lo demuestra día a día, en la palabra más tonta, o en toda una novela llena de frases bien escogidas.

Una vez, un compañero de andanzas me dijo que parecía que esta persona me pagaba porque estaba todo el día hablando de él, de lo que hacía o dejaba de hacer, y la verdad, es que a día de hoy, puedo reconocer en este blog que sí que es cierto que me paga, pero no con dinero, tal y como se insinuaba, si no con algo que es más importante: felicidad.

A pesar de no conocer su rostro, de no saber si es rubio o moreno, si mide 1,60 o 1,80 m., es una persona (humana o no, ejem ejem) que dedica su vida a los demás, que ha conseguido un sexto sentido con tan sólo leer entre líneas, que hace que con una frase, pueda saber el estado en el que te encuentras, y actuar en consecuencia, haciéndote reír, cabrearte, o despertar, según lo que necesites en ese momento.

Se podría decir que es el Mary Poppins de la red, jajajaja.

Y porque al final, a su manera, de forma indirecta… el jodío sabe ser agradecido, dejando el siguiente escrito (por poner un ejemplo), delante de tus narices, como quien no quiere la cosa, para hacerte sentir bien…

Gracias por tu compañia

Tener verdadero éxito en la vida es:

Reír mucho y muchas veces;
Ganar el respeto de personas inteligentes;
Gozar del cariño de niños;
Ganar el reconocimiento de personas cualificadas y saber soportar la traición de falsos amigos;
Apreciar la belleza;
Buscar lo mejor en los demás;
Escuchar Radio One y disfrutar de los momentos que te da;
Dejar el mundo un poquito mejor de como lo encontraste, con un hijo sano, un jardín bonito o una persona más feliz, saber que al menos alguien ha vivido mejor gracias a ti.