Hoy va por Miguel

Ese gamberro con el que llevo más de 10 años como novios, más de 1 añito conviviendo con él, y 15 días como pareja de hecho.

Ha sido uno de los mejores apoyos que he tenido en esta vida, con lo mal que nos ha tratado tantas veces, con todo lo que me ha querido y me quiere, con lo que me cuida (y también me cabrea a veces, y yo a él, jeje), con todo lo que tonteamos, que a veces parece que llevemos apenas una semana, por lo que no se pierde la magia...

Porque es una de las mejores cosas que me ha pasado en la vida, y que espero conservar para toda la vida, porque decir que lo amo con locura, sería, probablemente, quedarme corta.

Por eso te dedico dos cosas. Una que encontré una vez por internet, y otra cosilla que le escribí el otro día.

Antes que el tiempo acabe
quiero decirte que te quiero,
porque esta vida no es más
que un extraño reloj de arena
en el que subimos y bajamos
arrastrados por la sutil corriente,
y nunca da tiempo
a decir lo que se quiere decir.
Anges de que el tiempo acabe
quiero hundirme y ahogarme
en tu doliente océano,
porque así de infinito es amar.
Pero hoy me quedan los sueños
y la noche es como una mano
que recoge mi alma y llora.
Algo pasa y la vida continúa,
y ese es el problema...
que el mundo no es eterno, y esa es la verdad.
El sueño se me gasta,
todo cambia, cruza y vuelve y muere.
de pronto no te digo
lo que diría,
por eso,
antes que el tiempo acabe
quiero decirte que te quiero
y, cuando llegue el momento,
ya todo lo que falta
será azul...

Gracias por hacerme soñar, porque los sueños nos hacen sentirnos más vivos.

Gracias por hacerme reír, porque nos hace que vivamos más años y ser más felices, aunque sea por unos pocos minutos en una eternidad.

Gracias por enseñarme cosas que no sé, o que sabía pero las moldeas para hacerlas mejores.

Gracias por dejarte querer, y quererme, porque mirar a los ojos de una persona y ver más de lo que las palabras dicen, y que emitan algo que nos impregne de felicidad, es una experiencia única.

Gracias por estar siempre ahí, por el apoyo, por llevarme por el camino correcto, aunque sea a base de discusiones, pero que me muestran lo equivocada que estaba, y reconocerlo.

Gracias por revelarme la mejor forma para decir “lo siento”, y a expresar el amor en tan sólo una mirada, un beso, una caricia.

Gracias por llevarme “al fin del mundo” casi todos los días, con sus cosas buenas y las malas también.

Gracias por regalarme la luna, las estrellas, y todo el firmamento sin pedírtelo, aunque sólo sea por verme sonreír ilusionada, emocionada…

Gracias por tantas cosas… que no tendría vida suficiente para agradecerte todo este tiempo.